«La crisis de los medios de Peter Watkins resulta día a día más relevante y necesario, a fuer de visionario y terriblemente acertado».— Jesús Palacios
La crisis de los medios es un certero aviso de la amenaza ya no inminente, sino omnipresente, del totalitarismo audiovisual, de la implacable y empobrecedora homogenización del lenguaje bajo un mismo paradigma narrativo, que margina toda propuesta que no se adapte a él y neutraliza todo desafío por medio de su infiltración formal en cualquier obra que se pretenda ingenuamente contestataria. Pero no es este un texto exclusivamente dirigido para las gentes de los medios, si no una lúcida disección —para uso y disfrute de todos los públicos— sobre el modo en que se fabrica la omnipresente papilla mediática que ya adquiere tintes de tomadura de pelo universal.
[...] Por crisis de los medios entiendo la irresponsabilidad cada vez mayor de los medios de masas audiovisuales (mma) y su devastador impacto en los seres humanos, la sociedad y el medio ambiente.
Hablo de la apatía generalizada del público frente a unos mma que actúan deliberadamente como medio de transmisión de ideologías violentas, manipuladoras y autoritarias; me refiero también al desconocimiento crónico y ampliamente extendido de los efectos que esos mma producen en cada uno de nosotros.
Hablo de la negativa, poco menos que unánime, de los profesionales del gremio a iniciar el más mínimo debate crítico con respecto a su oficio.
Hablo también de la represión feroz que se ejerce dentro de los mma para mantener a los profesionales dentro del redil y reducir al silencio cualquier forma de expresión que resulte disonante. Hablo, en fin, de la obstrucción que practican los sistemas educativos de todo el mundo para impedir el acceso de los jóvenes a formas críticas de enseñanza de comunicación audiovisual y a todo aquello que pudiera incitarlos a cuestionar el papel y las prácticas de los mma. [...]